8 trucos para mantener los azulejos de tu baño impecables

Con el uso diario que le damos al baño suelen quedar restos de jabón, cal, moho o suciedad que van manchando y opacando los azulejos. Aquí te damos algunos trucos que puedes poner en práctica para mantenerlos limpios y brillantes.

Cosas curiosas sobre los azulejos que tal vez no sabías.

• De acuerdo con un artículo del Instituto de Promoción Cerámica, un organismo autónomo con sede en España, la civilización egipcia fue pionera en utilizar recubrimientos cerámicos vidriados －el antecedente de los azulejos como los conocemos－en tumbas de la realeza, pavimentos suntuarios y dinteles de puertas.

• El término “azulejo” proviene de la palabra árabe hispana azzuláyǧ[a], y la definición recogida por la Real Academia Española es: ladrillo vidriado, de varios colores, usado para revestir paredes, suelos, etcétera, o para decorar.

• No sólo sirve para reducir la exposición directa a la humedad en las paredes del baño. También se utiliza en exteriores, además de elemento decorativo en edificios, como la Casa de los Azulejos, un emblemático palacio construido en México durante la época novohispana, donde incluso hay un conocido restaurante.

¡Azulejos relucientes con estos 8 trucos!

1. Durante la limpieza del baño elimina hongos y manchas de moho aplicando vinagre blanco sin diluir. Deja actuar unos minutos y luego talla con un cepillo o una esponja, según la magnitud de las manchas.

2. El vinagre blanco mezclado con agua es buenísimo para retirar los residuos de cal de los azulejos, cancelería de la ducha y revestimientos del baño. Si usas agua caliente, potenciarás su efecto.

3. Otro recurso es elaborar una solución con jabón líquido o lavavajillas, y mezclarlo a partes iguales con vinagre, aplicar, frotar con el cepillo y finalmente enjuagar o aclarar con un paño mojado en agua.

4. Los productos para limpiar cristales te pueden servir para que los azulejos queden relucientes después de limpiarlos. Basta con pulverizar un poco y luego pasar un trapo limpio y seco.

5. Las lechadas o juntas entre azulejos son una de las áreas más retadoras de la limpieza del baño, ya que cuando se acumula humedad y residuos de jabón con el tiempo promueven la formación de hongos, que además de dar un mal aspecto pueden poner en riesgo tu salud. Si las manchas no son tan severas, prueba rociando peróxido de hidrógeno (también conocido como agua oxigenada) en las líneas, frota con un cepillo y enjuaga con agua tibia.

6. Si el truco anterior no funciona porque la mugre de las lechadas está muy incrustada, entonces puedes hacer una pasta con el mismo peróxido y bicarbonato de sodio, aplica y deja reposar un rato; y como en la opción anterior, cepilla y enjuaga. Un tip adicional: cada cierto tiempo inyecta sellador en las juntas, esto como mantenimiento, sólo hazlo cuando la zona esté totalmente seca.

7. ¡No tires tus cepillos dentales viejos! Dales una segunda oportunidad de ser útiles en la limpieza del baño. Gracias a la forma del cabezal y sus cerdas delgadas, son una alternativa eficaz y económica de llegar a esos rincones difíciles donde la suciedad entre los azulejos se resiste a salir.

8. Para mantener los azulejos limpios más tiempo, cada tercer día antes de ducharte, deja correr el agua caliente unos minutos; el vapor generado ayudará a aflojar los restos de jabón que pudieran tener. Después de eso pasa un trapo o esponja húmedos, y listo. No dejes que esa agua potable se desperdicie, almacénala en una tina y úsala en otras labores de limpieza, ¡o para regar tus plantas!

Termina tu sesión de limpieza del baño abriendo ventanas, o coloca un abanico en el área para ventilar perfectamente el espacio.

¡Vive tu vida como tú la quieres con la tranquilidad de saber cómo cuidar cada espacio de tu hogar! Si conoces otros trucos para lograr azulejos brillantes, nos encantará que nos cuentes en los comentarios. ¡Comparte este artículo para que más personas aprendan a hacerlo!